Escribo con nombre y apellido, mi nombre es José Luis Villagrán Barahona, dirigente nacional ANFUR para expresar mi molestia respecto de las palabras del señor pino, en primer lugar yo como psicopedagogo y dirigente, trabajo como todo funcionario, jamás he torturado a nadie y jamás lo haría; por otra parte si busca en transparencia, mi sueldo como psicopedagogo es un sueldo bajo como profesional, por ser profesional no puedo realizar horas a pago y además, trabajo en un programa de familias de acogida.
Creo que lo dice el sr pino, no es la forma de construir un nuevo servicio, más bien continua en la lógica de culpar al mundo y no hacerse cargo de sus propias responsabilidades.
Respecto de ANFUR, puedo decir que es una asociación tan pequeña, que yo debo costear mis viajes al norte, en stgo no tenemos oficina salvo un sucucho en la dirección regional, que deambula entre sala de entrevistas y reuniones.
Para concluir podría decir que si el 80% de los funcionarios son agresores como sostiene, la verdad es que no habrían niños vivos, las muertes están asociadas a circunstancias accidentales y para quienes trabajamos en los centros, sabemos que por las falencias estructurales del sistema, tanto funcionarios como niños, están expuestos a riesgo de muerte.
Lamento que le hayan dado tribuna a éste señor; de hecho yo elabore un informe de necesidades de las nuevas resistencias.
Gustoso podría dar una entrevista técnica y con fundamentos estadísticos; no haría un monólogo en catarsis, soy un profesional, dirigente gremial orgulloso de trabajar en SENAME, donde ya es difícil recuperar a los niños, ya que han sido vulnerados desde el vientre materno por el estado de chile.
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Escribo con nombre y apellido, mi nombre es José Luis Villagrán Barahona, dirigente nacional ANFUR para expresar mi molestia respecto de las palabras del señor pino, en primer lugar yo como psicopedagogo y dirigente, trabajo como todo funcionario, jamás he torturado a nadie y jamás lo haría; por otra parte si busca en transparencia, mi sueldo como psicopedagogo es un sueldo bajo como profesional, por ser profesional no puedo realizar horas a pago y además, trabajo en un programa de familias de acogida.
Creo que lo dice el sr pino, no es la forma de construir un nuevo servicio, más bien continua en la lógica de culpar al mundo y no hacerse cargo de sus propias responsabilidades.
Respecto de ANFUR, puedo decir que es una asociación tan pequeña, que yo debo costear mis viajes al norte, en stgo no tenemos oficina salvo un sucucho en la dirección regional, que deambula entre sala de entrevistas y reuniones.
Para concluir podría decir que si el 80% de los funcionarios son agresores como sostiene, la verdad es que no habrían niños vivos, las muertes están asociadas a circunstancias accidentales y para quienes trabajamos en los centros, sabemos que por las falencias estructurales del sistema, tanto funcionarios como niños, están expuestos a riesgo de muerte.
Lamento que le hayan dado tribuna a éste señor; de hecho yo elabore un informe de necesidades de las nuevas resistencias.
Gustoso podría dar una entrevista técnica y con fundamentos estadísticos; no haría un monólogo en catarsis, soy un profesional, dirigente gremial orgulloso de trabajar en SENAME, donde ya es difícil recuperar a los niños, ya que han sido vulnerados desde el vientre materno por el estado de chile.
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